El Mesón de la Patagonía
Siempre tuvimos la inquietud de tener un restaurant. Un lugar que fuera para recibir a los amigos, una extensión del comedor de nuestra casa, un lugar que, sin ser pretencioso, satisfaciera nuestras ´mañas´. Ricos y helados copetes, picoteos tent...
Siempre tuvimos la inquietud de tener un restaurant. Un lugar que fuera para recibir a los amigos, una extensión del comedor de nuestra casa, un lugar que, sin ser pretencioso, satisfaciera nuestras ´mañas´. Ricos y helados copetes, picoteos tentadores para una buena conversa, comida que fuera un placer hasta para el más sibarita de los mortales, postres tentadores, ambiente acogedor, etc... En esa búsqueda, y sin saber exactamente cómo se podía concretar este ´deseo´, y recorriendo lo que es para nosotros ?nuestro barrio? encontramos esta casa de adobe. Había sido remodelada para convertirse en un pub mexicano que nunca llegó a abrirse. A pesar de eso, el lugar nos atrajo. Paralelamente y por esas cosas mágicas de la vida, se cruza en nuestro camino un antiguo amigo del pelao, que había pasado algunos años en la Patagonia. Así, decidimos que este lugar era perfecto para difundir la hasta entonces desconocida ´Cocina de la Patagonia´, Fue así que un 14 de marzo de 1997 nació el primer Mesón. El éxito se nos vino encima muy rápido. El cordero y la centolla se convirtieron en protagonistas estrellas de la nueva gastronomía. El Mesón se convirtió sin quererlo, en el gran impulsor del rescate de la comida regional. Y nos creímos el cuento, pensábamos que éramos buenos para la pelota, y, que, había que ponerse a chutear... Así nacieron Las Chancherías del Calvo y El Palafito del Calvo, con distintos socios, en otros barrios, con propuestas que nunca alcanzaron la ?fama? del original ?Mesón del Calvo?... Después aparecieron por ahí, tanto en Santiago como en otras ciudades, otros Mesones y derivados, hoy todos desaparecidos. Esas pelotas no las chutiamos nosotros.... Producto de la desaparición de las Chancherías y El Palafito, y todo lo que eso significó, y con la idea de cambiar de vida, nos embarcamos en una nueva aventura. Así, vendimos nuestro Mesón, lo único que nos quedaba, y nuestra casita en El Arrayán y partimos los 4, nosotros y nuestros 2 hijos, a la más loca y osada de nuestras ideas...Una posada en las playas de Brasil, para, como siempre, recibir a nuestros amigos, extender ya no sólo el comedor de nuestra casa sino que ella por completo. Fortaleza, una de las ciudades más al Norte de Brasil, con las playas más increíbles, fue nuestro destino. Primera etapa: un restaurant, que se llamó ´O Careca da Patagonia´ o sea ´el pelao de la Patagonia´. La historia que sigue es bastante larga, pero hagamos un compacto: No logramos superar esa etapa, muchos factores nos jugaron en contra, cometimos bastantes errores, y luego de casi 2 años, aquí estamos de vuelta. Pero no crean que con la cola entre las piernas, un poco quizá. Ha sido mucho más fuerte las ganas de volver, de ver a los amigos, de caminar por las calles de Lo Barnechea, cruzarse con el curaito de la esquina, que el diarero te salude, pedir ?fiao? en la panadería., estar en CHILE LINDO...Y como si fuera poco, después de, digámoslo, una mala jugada del destino, éste nos pide disculpa con el mejor regalo, con un inesperado pero íntimamente soñado por los 2. La posibilidad de recomprar el Mesón, el nuestro, el original. Estamos felices, agradecidos de quienes nos han ayudado (Con $$$ para partir..) y con más ganas que nunca!!! Otra vez nuestra casa, así nace ?EL REGRESO DEL MESÓN; lo mejor de la Patagonia para los amigos de siempre?, hoy, con gran éxito lo hemos rebautizado ´EL MESON DE LA PATAGONIA´ y así estamos....LOS ESPERAMOS, No se lo pueden perder!!!
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